Aquí no hay ni un cómo ni un porqué.. solo tenemos una razón, un hecho, un acontecimiento. No hay NADA que esté justificado, parece que no queda NADA por lo que luchar.. Pero aunque todo se esté cayendo ante nuestros ojos, aunque todo en lo que creimos se convierta en polvo y aunque todos los nuestros nos hayan traicionado, no debemos rendirnos nunca. Parece que decirlo suena facil, pero aguantar hasta el final es muy complicado, salir vivo de esta resultará difícil. Más que nada porque ya no hay ningún apoyo...
Cierto es que a veces sea mejor huir que pelear, que sea mejor correr que enfrentarse a todo, pero habrá que hacer un gran esfuerzo para conseguir ganar.
Porque aquí NADIE se salva, porque TODOS tenemos la culpa, y porque nadie puede buscar a una sola persona a la que acusar.
Y todo esto pasa porque somos unos egoistas y no pensamos en nada. Ni en los que queremos, ni en los que odiamos...
Porque a veces hay que ponerse en el lugar del enemigo para buscar sus estrategias...
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